Tres sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) avalan la legalidad de las obras del hotel de La Tejita. La promotora trabaja de manera transparente y responsable, ya que cuenta con los permisos necesarios para el desarrollo del proyecto.
Las obras se reiniciaron el pasado mes de febrero, tras contar con las sentencias TSJC que avalan que el nuevo deslinde no afecta al desarrollo del proyecto. Los trabajos continúan su curso, según lo previsto ya que todas las licencias y autorizaciones que amparan a la promotora para la realización de las obras se encuentran actualmente vigentes y son eficaces.
Ante las declaraciones de los grupos que se oponen al proyecto, cuestionando la autorización para trabajar dentro del dominio público marítimo-terrestre, la promotora recuerda que las sentencias del TSJC dicen, textualmente, que “La autorización y licencia urbanística, por lo tanto, se ajustaban al deslinde de la zona marítimo terrestre vigente, y como refiere la sentencia del Tribunal Supremo, Sala Tercera, Sección 5ª, de 6 de mayo de 2002, el deslinde iniciado con posterioridad no puede afectar a licencias ya concedidas.”
En relación al informe de la Dirección General de la Costa y el Mar, dependiente del Gobierno central, al que hacen referencia colectivos contrarios al proyecto, la promotora aclara que ese informe es de 2021 y todos sus argumentos son anulados por las sentencias posteriores del TSJC.
La promotora insiste en que “cuenta con todos los permisos necesarios y que se siguen los procesos establecidos por las autoridades competentes. Estamos comprometidos con el respeto al medio ambiente y trabajamos de manera transparente y responsable, por lo que pedimos el máximo respeto a las personas que se encuentran realizando los trabajos previstos en la primera fase del proyecto”.
Un hotel integrado en su entorno
Es importante recordar que el proyecto se integra en el paisaje, y que construye muchas menos camas de las que se le permiten. Concretamente, en primera línea la altura permitida de tres plantas se reduce prácticamente en su totalidad a una planta. Su construcción generará cerca de 200 empleos directos y más de 300 de forma indirecta.
La promotora, Grupo Viqueira, adquirió la urbanización donde se enclava la parcela hotelera en el año 1994. En este tiempo ha ido promoviendo distintas actuaciones hasta crear un núcleo donde residen en la actualidad más de 1.000 familias, más de treinta pequeños negocios, la mayoría regentados por pymes canarias, y entregado para uso y disfrute público más de 18.000 metros cuadrados de zonas verdes y de esparcimiento.